El parto  es uno de los momentos más importantes, la experiencia matriz que marca cómo encaramos la vida. Y si fue violento o si fue un parto que separó a la madre del hijo, sin tener en cuenta las emociones de la madre, sus necesidades, las consecuencias estarán relacionadas con el miedo y no con la experiencia de amor.

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Hay familias marcadas por la desgracia y todos nos compadecemos cuando vemos una y otra vez caer a los miembros de la misma como si fueran piezas de dominó ante un destino cruel. Familias donde predominan los suicidios, los asesinatos, las muertes por enfermedades terminales, los accidentes de tránsito. 

El ciclo de la luna y el ciclo de la mujer están estrechamente interrelacionados, ya que el cuerpo femenino responde a las fases lunares; pero el ciclo de la luna no es sólo el calendario del cuerpo de la mujer sino que es también un indicador de los cambios que se producen en su conciencia.

Lo que cura no es de este mundo y con esto me refiero a que no es propiedad exclusiva ni de nuestra mente (lo que conocemos de ella), ni de nuestro corazón, ni del  cuerpo. Lo que cura es poder ampliar los límites de nuestra conciencia, hacer espacio, incluir lo que estaba afuera.

Durante mucho tiempo, se creyó que la neutralidad del psicoterapeuta era muy importante para poder hacer un diagnóstico claro y objetivo de la patología del paciente. La idea subyacente a esto, es que podemos separar la realidad observada del observador.

Cuando hablamos de sufrimiento desde el punto de vista psicológico, muchas veces lo utilizamos como sinónimo de dolor. Pero el dolor es la respuesta natural y saludable a una pérdida de cualquier tipo: un ser querido, un trabajo, una relación, una condición física o un objeto de valor. El sufrimiento en cambio, surge de la oposición a la realidad; de creer que las cosas deberían ser de otra manera o de apegarnos a como las cosas fueron.

Los sueños nos abren una puerta a la situación existencial que estamos viviendo. Fritz Perls trabajó e ilustró en forma brillante cómo para adaptarnos a este mundo dejamos atrás aspectos importantes de nosotros mismos y cómo, a través de los sueños, podemos recibir su mensaje e integrar aquello que dejamos afuera. Perls lo llamo los “hoyos de la personalidad” aquellos vacios de la personalidad, donde evitamos el contacto.

Un análisis oncológico que tiende a la desdramatización de la enfermedad, a combatir el peso mortal de la palabra y encarar los tratamientos sin temores.